Bienvenidos a Phnom Penh, la capital de Camboya, renovada. Con sus templos budistas, sus monasterios invitando a la tranquilidad, su paseo del río y sus parques llenos de gente activa, la ciudad más grande de Camboya, deja atrás su pasado compuesto de un genocidio desafortunado. Bienvenidos a Phnom Penh.
Phnom Penh renovada
Después de nuestra estancia en Sihanoukville, nos dirigimos hacia Phnom Penh, dispuestos a ser los testigos de la reconstrucción social de un pueblo marcado por el genocidio. Nos fuimos con la empresa de transporte público, Surya. Todo el mundo nos desaconsejó esta empresa local, incluso el libro de viaje! De hecho, parece que la mini-van es el modo de transporte preferido de los turistas en Camboya. Pero bueno, de que sirve viajar si no se experimenta el swing local? Lo intentamos y fue tres veces más barato y tres veces más cómodo que una mini-van, yeah baby.

Kung Fu time!
Al llegar a Phnom Penh, encontramos una ciudad en pleno crecimiento, ornada de templos, mercados, parques y de tráfico sin fin. Añádanle a todo esto una rodeada de gente ofreciéndonos hotel y tuk tuk en la estación de autobús (no sir thanks) y una caminata olímpica de 2km con nuestras mochilas bajo un sol abrasador hasta un hotel fantasma, que oops! Sorry my friend, estaba más cerrado que un negocio en extinción.
Después de la propia pelea con la gente del “nuevo negocio”, un par de llamadas y de haberle dado varios nombres indignos a la madre del personaje que nos reservó el hotel fantasma, nos acomodaron en otro lado. Bof, en esas situaciones no vale desesperarse mucho, siempre hay solución.
El paseo del Mekong.
Y así comenzó la diversión. Nos fuimos a cambiar las ideas en el paseo del Mekong. Este paseo, bien animado por la noche, es el lugar preferido de las familias, de los amigos, de los novios y de las personas que desean bajar unas cuantas libras extra. Aquí hay que decirle hola al balón de fútbol sin dueño visándote las cabeza, a los míster músculos, a las hordas de niños jugando por todos lados y a las banderas !
En frente del paseo se encuentran muchos hoteles y cafés de moda para aquellos que tienen el bolsillo más lleno que el de nosotros. Ahh aquí se respira aire nuevo.

Bajo el ojo real
Los templos (Wats) y Monasterios
Al día siguiente fuimos a dar un paseo en los monasterios de Phnom Penh. La mejor parte de visitar un templo budista, es que se puede caminar libremente en los monasterios o en las órdenes en los que se encuentran. Estos son pacíficos mini-barrios, con casas tradicionales, pagodas y hasta tumbas! Caminando se puede observar la vida diaria de los monjes y hasta se puede asistir a las ceremonias de los templos.

El Wat Ounalom fue diseñado en 1944 e incluye más o menos 44 edificios que han sido reconstruidos ( a Pol Pot se le ocurrió la estúpida idea de arrasarlos)

Se puede asistir a las ceremonias gratis

Otro magnífico Wat

Monjes, watts, monjes, wats…

Una de las casas dentro del mini-barrio de uno de lis monasterios
El complejo de Palacio Real
Para visitar todos los edificios que acompañan al palacio, nos tuvimos que cubrir las piernas y los hombros. No, chica, la camisola y el pareo no te funcionarán, si llegas así, te van a mirar como a una impura y te arrojarán con piedras fuera del palacio.
Entramos con un millón de personas y tomamos las fotos que nos fueron permitidas. No se puede simplemente tomar fotografías dentro de los templos o edificios, incluso si la entrada les cuesta un ojo de la cara $$$, doble bof 👎🏼
Al lado del palacio se encuentra la Pagoda de Plata, donde hay un Buda en esmeralda, un Buda de oro de 90 kg con más de dos mil diamantes en el cuerpo y un montón de bling bling por todas partes de la pieza. Totalmente coherente con la cantidad de pobres hurgando en las basuras fuera del palacio…

La foto que, oh no, oh no, no tomamos
El Parque Wat Botum
Porque hacer un poco de ejercicio con abuelitas cool y personas llenas de energía es muy, muy, muy divertido.
Y porque después se le puede regresar al cuerpo la grasa se quemó en los aeróbicos consumiendo otros tipos de grasa, en el mismo parque y con cientos de Camboyanos felices de verlos ahí.

En la parte este del parque se come barato y come rey

O como una reina
El Museo del Genocidio de Toul Sleng
Este museo cárcel es cosa seria. Breve explicación: Pol Pot fue un dictador psicótico que aterrorizó a la población de Camboya en los años 70. Durante su régimen, intelectuales, profesores y cualquiera que usara gafas (este último detalle no es una broma, es verdad!) Terminaba sea en la cárcel o siendo asesinado por los miembros de su partido, el Khmer Rouge.

Antes del genocidio, Tuol Sleng era una escuela
El tirano quería instalar un régimen comunista agrario, haciendo trabajar como esclavos 24h/24 a todos, incluso a los niños. La prisión de Toul Sleng o S-21, fue uno de los centros de detención y de interrogatorio de prisioneros, o de hecho de cualquier persona sospechosa a los ojos del régimen.

6. Durante el latigazo o el électrochoc, se prohíbe gritar fuerte

Lugar de tortura con sensación de horror incluida

Hombres, mujeres y niños, fueron condenados a vivir aquí
Más de 14.000 personas fueron brutalmente torturadas en Tuol Sleng para arrancarles la confesión de sus supuestos crímenes. Luego de lo cual eran enviadas a Choeung Ek (a 15 km de la carcel) para ser exterminadas.

Solamente 7 personas sobrevivieron a este horror
El Museo Nacional
OK, para cambiarnos las ideas fuimos al Museo Nacional. Un edificio imponente y rojo construido en 1920. El museo incluye las riquezas de los reinos pre-Angkor y post-Angkor. La belleza del edificio y de sus jardines son también dignos de una visitar.

No toques!

Gemelas
Las piezas en el interior del museo nos dieron una idea de lo que veríamos más tarde en Siem Reap.
Visita de Phnom Penh
Bueno, confesión, también pasamos mucho tiempo en los parques mirando a los padawanes jugar, caminamos como locos sin rumbo fijo y atravesamos todos los mercados posibles. Veredicto? Go to hell Pol Pot, Phnom Penh esta en plena creación de su propio futuro, esta viva y su espíritu está bien renovado.

Viva Phnom Penh
Hotel en Phnom Penh
Después de nuestra aventura con el hotel de fantasma nos quedamos en el hotel Longlin House. Para reservar otro hotel y comparar precios hagan clic aquí.

Bye bye Phnom Penh
Próxima estación, el pueblo flotante de Krakor!
Traveling Nomads es un blog de viajes creado por una Bibliotecaria geek y un Consejero pedagógico con experiencia en el arte de viajar. Juntos, estos aventureros han dejado su huella en cuatro continentes .